Las Remesas hacia Centro América



    En
los últimos quince años las remesas familiares se han convertido en una nueva fuente de ingresos para varias economías Centroamericanas.  Estos flujos de dinero se han caracterizado por su creciente cantidad, por la presencia de un número significativo de actores y de actividades, a veces poco conocidas con anterioridad en el subcontinente, y por su impacto en el crecimiento económico y el desarrollo.  Cualquier análisis sobre futuros escenarios en la región vinculados con las remesas requiere estudiar de cerca estos actores ya que detrás de ellos se encuentran las variables determinantes de la continuidad del envío.  Este trabajo sostiene que el futuro escenario de las remesas para la región mostrará índices similares de desenvolvimiento.  Sin embargo,  existe el potencial que haya un aumento alternativo de recursos externos también proveniente de emigrantes: de continuarse y expandirse los vínculos comunitarios, puede esperarse un impacto mas sostenido sobre el desarrollo local. 

 

1. Remesas y Desarrollo

   
Uno de los debates recientes sobre las remesas y el desarrollo ha originado desde la crítica sobre el ‘uso productivo’ de las remesas como indicador de desarrollo.  Sin embargo, esta literatura es bastante imprecisa sobre este tema.  Por ello, antes de partir de cualquier análisis sobre el futuro de las remesas en la economía y sociedad de un país, es importante plantear una definición mínima de desarrollo.  En este trabajo la definición de desarrollo se toma del proyecto de Naciones Unidas para el Desarrollo que estipula que el “objetivo real del desarrollo debe ser el de crear un ambiente que permita al individuo u gente que disfruten una vida extendida, saludable y creativa.” Esto se traduce en términos de la capacidad de una persona de poder tener una vida duradera y saludable, de educarse y disfrutar de un estándar de vida decente”.  En este sentido, el desarrollo no puede considerarse en un tono abstracto, sino en un contexto concreto de la vida cotidiana de un individuo y su sociedad.  Dentro de ese contexto se debe de analizar el impacto de las remesas en el desarrollo  y sus perspectivas futuras.

 

2. Actores

   
Tradicionalmente se ha concebido que las remesas familiares involucran al emisor y al receptor.  Sin embargo, una observación más cercana permite señalar que también existen otros actores vinculados directa o indirectamente con el flujo de remesas.  Además del inmigrante que envía y los miembros de un hogar que reciben la remesa, se encuentran los intermediarios (bancos, agencias courier o encomenderas, cooperativas, etc.), el gobierno, asociaciones comunales en pro del país de origen e incluso organismos internacionales. 

 

a) Emisor

   
Los inmigrantes que emiten remesas a Centro América poseen ciertas características importantes de carácter demográfico, social y legal (y de tipo moral) que tienen una importante incidencia en el futuro del envío de tal dinero.  En primer lugar, los inmigrantes centroamericanos son personas jóvenes de ambos sexos y de muy bajos ingresos.  Por lo general los centroamericanos son personas pobres con ingresos inferiores a la mediana anual del ingreso de hogares en Estados Unidos.  En 1996 ocho de cada diez hogares Centroamericanos tenían en su mayoría un ingreso menor a los $20,000 (ver gráfico), es decir menos de $1500 mensuales.  Tres explicaciones inmediatas por estos bajos ingresos radican en que más de un quince por ciento de su población son menores de edad, un porcentaje está sin empleo y además el nivel educacional de ellos es bastante bajo.  A pesar de estas características, los centroamericanos envían por lo general un promedio de $3000 anuales. 

   
No todos los inmigrantes envían las mismas cantidades.  Varios estudios han observado que cuatro variables que expliquen el envío de dinero son el nivel de ingreso, el estado migratorio legal, el tiempo de residir en Estados Unidos y las obligaciones familiares para con el país de origen. 


    Un estudio realizado por el Tomás Rivera Policy Institute en la ciudad de Los Angeles encontró que las personas que se encuentran en situación indocumentada envían mas dinero que aquellas con residencia legal de algún tipo.  Sin embargo, el número de personas indocumentadas es proporcionalmente más bajo que el número de personas con residencia legal.  Se estima que un cuarto de la población Centroamericana está indocumentada.  También se observó que existe un aumento relativo de cantidades enviadas a como aumenta el ingreso.  Sin embargo este aumento es curvi-lineal: después de cierto tiempo las remesas vuelven a disminuir, aunque el cambio es relativamente menor.  También esto significa que aquellas personas de bajos ingresos tienden a enviar sólo lo que pueden.      Finalmente, otros estudios han señalado que mientras existan obligaciones familiares en el país de origen, tales como la presencia de un(a) hermano(a), hijo(a), padre o madre u otro familiar cercano, los inmigrantes seguirán enviando dinero.  Entre mayor el número de familiares mayor la obligación.  La combinación de estos factores, mas la presión social dentro de una misma comunidad son incentivos entre los inmigrantes para enviar dinero.


    Estos patrones generales han de mantenerse en los próximos años ya que la inmigración Centroamericana continua ocurriendo de manera sostenida y en tres cuartas partes es de un carácter legal.  Así, mientras unos grupos aumentan su ingreso a través del tiempo, otros nuevos inmigrantes entran al país empezando con ingresos más bajos, nivelando así el flujo anual. 


    Sin embargo, hay tres variables que podrían crear potencialmente una eventual disminución de flujos de dinero son el aumento en deportaciones, la suspensión de beneficios sociales, o pérdida de empleo, y el aumento de obligaciones en los Estados Unidos.  En el primer caso, las deportaciones potencialmente afectan a un cuarto de la población inmigrante centroamericana, y de este número hay un porcentaje bastante alto que es elegible bajo alguna amnistía recientemente aprobada a través de NACARA y la subsecuente interpretación ofrecida por INS.  En el segundo caso, el número de Centroamericanos que reciben algún beneficio social es bajo, y muchos de los que reciben algún tipo de beneficios no envían dinero.  En el caso del aumento de obligaciones del inmigrante, éste puede que incida con la disminución de dinero.  Estas obligaciones se pueden traducir en el aumento de círculos familiares, adquisición de propiedad u otra deuda o gastos en educación o emergencias de salud.

 

b) Receptor
   
 
    Las personas que reciben remesas en Centroamérica provienen de diversos recursos.  No todos pertenecen a círculos de pobreza, aunque la gran mayoría si son de bajos recursos.  En El Salvador, por ejemplo, los principales grupos que reciben remesas son aquellos que tienen un ingreso menor de dos mil colones (42%) y aquellos cuyo ingreso es superior a los tres mil (39%).  En cuanto al patrón de consumo y ahorro que exhiben los receptores de remesa, éste se ha mantenido relativamente constante.  Es decir, en la mayoría de los casos, el dinero que se utiliza llega a ser empleado para propósitos de consumo diario, y un pequeño porcentaje, menos de un 10% se usa para ahorro o inversión. 


    Sin embargo, es importante mencionar que una taza de ahorro del 10% es relativamente alta. Por otro lado, se desconoce el patrón de consumo de quien no recibe remesas, por lo que resulta difícil hacer cualquier generalización o comparación sobre el tema del ahorro.  Es importante observar también que este patrón de consumo ha creado nuevas fuentes de empleo y nuevos mercados que satisfacen la demanda de quienes reciben remesas.  Otro aspecto de gran interés se refiere al del aumento de la tasa de ahorro nacional en estos países.  Tradicionalmente se sostenía que tal taza de ahorro incrementaba gracias a la ayuda externa, sin embargo en un período de disminución de la ayuda se observa que, con los otros factores productivos permaneciendo constante, puede que el aumento sostenido de las remesas esté influyendo directa e indirectamente en el aumento de la tasa de ahorro en varios países centroamericanos.

   
Además de mencionar las características de quienes reciben remesas, es importante agregar que los Centroamericanos siguen inmigrando hacia los Estados Unidos, en gran parte por los vínculos que han establecido permanentemente con familiares residiendo en ese país, así como por necesidades económicas.  Con el aumento demográfico, es muy posible que esta tendencia migratoria continúe.

 

c) Asociaciones comunales

    Un factor que ha cambiado en la migración es el relacionado con el surgimiento de asociaciones comunales en los Estados Unidos conformadas por inmigrantes Centroamericanos.  Este movimiento comunal se observa de manera más dinámica entre Salvadoreños, sin embargo, existe entre los Hondureños y Guatemaltecos.  Los Nicaragüenses por otro lado no han logrado crear tal tipo de asociaciones.  Estas asociaciones por lo general tienden a exhibir tres características: primero, desempeñan varios tipos de actividades en pro de la ciudad o pueblo del cuál el inmigrante es de origen.  Las actividades varían desde la recolección de ropa y juguetes hasta la recolección de dinero para invertir en construcción u otras actividades.  Segundo, la estructura organizacional varía dependiendo de la existencia de contrapartes en el país de origen, y tercero, el proceso de toma de decisiones también varía, de grupos con liderazgo rudimentario a grupos con una junta directiva organizada y especializada. El envío que realizan estas asociaciones han recibido el nombre de ‘remesas comunitarias’ haciendo referencia a una extensión de las remesas familiares.  En términos contables, sin embargo, éstas son donaciones privadas que caen dentro del marco de las transferencias unilaterales de la balanza de pagos.

   
Estas asociaciones han crecido en los últimos siete a nueve años, fechas en que la mayoría empizaron a surgir.  Una de las dificultades de análisis de estas asociaciones se refiere a su intangibilidad.  Se desconoce el número de asociaciones comunales de cada país origen que operan en Estados Unidos.  Una de las razones estriba en que un número no determinado de esas asociaciones dejan de existir después de unos años cuando su fundador deja de ejercer funciones.  Otra dificultad de su intangibilidad se refiere a que no tienen una dirección y punto de contacto fijo, éstos cambian con cada nueva directiva.  Y finalmente, solo un número muy pequeño se registra oficialmente como organización sin beneficio de lucro, situación que dificulta aun mas su identificación.  Sin embargo, es posible que existan cienes de estas asociaciones para cada uno de estos tres países, siendo las salvadoreñas las mas abundantes. También se desconoce la magnitud del impacto económico de estas asociaciones, pero en donde se ha realizado trabajo de campo, se ha constatado que estas asociaciones envían en promedio el equivalente a un mínimo de $10,000 anuales.  La CEPAL ha estimado que en total la donación que las asociaciones envían equivale a un uno porciento del total de las remesas que los inmigrantes envían.


    Es importante recalcar, sin embargo, que estas asociaciones se están desarrollando en mayor número en varias partes de los Estados Unidos y están tratando de establecer vínculos más estables con sus pueblos de origen.  La tendencia de estas asociaciones no es una de disminución sino de incremento.  A como estas asociaciones permanecen activas a lo largo del tiempo, ellas diversifican sus actividades y se enfocan en actividades de desarrollo local dejando un impacto positivo, por lo menos en el corto plazo.  Aun cuando uno acepte la cifra de un uno porciento del total de las remesas, este número para El Salvador es el equivalente a diez millones de dólares anuales, es decir, a la mitad de la ayuda económica que brinda los Estados Unidos a este país.

 

d) Intermediario

   
Un actor poco analizado o al menos considerado en los estudios sobre remesas familiares es el referente al de los intermediarios de remesas.  Agencias de encomiendas o compañías couriers juegan un rol muy importante en la transferencia de remesas, así como en la economía del país.  Estas agencias manejan diferentes tipos de servicios, tales como la transferencia del dinero, entrega a domicilio y cambio de la moneda.  En cada uno de estos casos las compañías, grandes o pequeñas, han manejado alrededor de dos tercios o al menos la mitad del monto total de remesas enviadas anualmente.  Bancos, y viajes personales de familiares se han ocupado del resto.  Compañías como Gigante Express, Leon Express, King Express, o Western Union entre otros operan en Nicaragua, Guatemala, Honduras y El Salvador haciendo entrega de remesas y cambiando la remesa en moneda local.  En muchos casos los cambios que realizan estas compañías se realizan en tazas desfavorables al consumidor.


    Estas compañías son poco probables de desaparecer, más bien sus actividades se han estabilizado y se han hecho más competitivas, por lo que los cobros por envío puede que vayan ha disminuir en un mediano plazo.  Es importante recalcar que se ha observado también un cambio lento pero gradual en el envío de dinero a través de bancos y/o cooperativas de ahorro y crédito.  Este cambio tiene implicaciones positivas muy importantes para quien recibe el dinero, así como para quien lo envía ya que ambas partes formalizan sus ingresos en cuentas bancarias y pagan un precio más bajo que las agencias courier.

 

e) Gobierno 

    El gobierno juega un rol muy importante en Centroamérica y en lo que respecta a las remesas los gobiernos de estos países han escogido la política de no intervenir en la transacción o en el uso del dinero proveniente de las remesas.  La participación que estos gobiernos han tenido en relación con las remesas se ha concentrado en la medición por parte de los Bancos Centrales de cada país en determinar las cantidades recibidas por concepto de remesas.  Todos los bancos siguen la misma metodología de análisis de los datos reportados diariamente por los bancos y las agencias courier y otras empresas financieras sobre la entrada de remesas.


    Otra política que persiguen los gobiernos es la de no imponer impuestos a los inmigrantes que traen remesas en especie.  En El Salvador aduanas permite la entrada de bienes de hasta por un valor de $1500, en Guatemala el límite es de $2000 y en Nicaragua es de $1000.  De esta forma se permite que los inmigrantes y sus parientes residentes en Centro América introduzcan equipos tales como electrodomésticos u otros de tipo suntuario.  En algunos casos, sin embargo, esta política ha afectado a los importadores de electrodomésticos cuando algunos de los inmigrantes o familiares traen cantidades para comerciar y venden los artículos a precios más bajos que el del comerciante que ha pagado impuestos de importación.


    Pero en general, a diferencia de países como México, en donde se ha perseguido una política agresiva de atraer donaciones comunitarias, en Centro América los gobiernos se encuentran en una etapa relativamente marginal.  En principio, la preocupación principal de política exterior se ha concentrado en apoyar la legalización de los compatriotas en Estados Unidos.  Además, como un proceso más reciente gobiernos como el Salvadoreño han creado oficinas de enlace con comunidades locales de ayuda al pueblo de origen–la oficina en Washington DC ha tenido tuvo un rol positivo en fomentar vínculos comunitarios.  En Guatemala se ha tratado de crear un contacto con las comunidades guatemaltecas, sin embargo el esfuerzo ha sido mínimo.  Esto se debe en parte a la falta de confianza que los guatemaltecos han tenido con el gobierno.  Sin embargo, la embajada Guatemalteca ha tratado de proponer que se realicen proyectos conjuntos con el gobierno, organismos internacionales y las comunidades guatemaltecas para financiar proyectos de desarrollo mediante donaciones de contrapartida.

 

d) Organismos Internacionales

   
Finalmente un actor que le ha venido a poner atención a las remesas es el de los organismos internacionales.  Organizaciones como el FMI, CEPAL, Banco Mundial, o AID han puesto interés en las remesas desde el punto de vista de su influencia económica y su potencial para el desarrollo.  Aunque estas organizaciones carecen de mucho conocimiento del rol de las remesas, es muy probable que se constituyan en agentes de formación de agendas sobre las remesas y motiven la implementación de políticas encaminadas al aprovechamiento de las éstas.

    Es importante señalar que tanto la sociedad centroamericana, los gobiernos del área, como estas instituciones muestran un poco conocimiento del comportamiento de las remesas.  A pesar de las grandes cantidades de dólares que entran al país por concepto de remesas, en efectivo o en especie, existe poco conocimiento de la magnitud del flujo monetario, mucho menos de las condiciones sociales en que viven quienes envían las remesas.  Aun existen muy pocos estudios sobre remesas en países como Guatemala, Nicaragua u Honduras, e incluso El Salvador, que recibe el equivalente a lo que los otros tres países juntos envían, tiene pocos estudios sistemáticos actualizados sobre las remesas.  Esta situación viene a crear una restricción en las posibilidades de mejor conocimiento y formulación de políticas futuras.

 

3. ¿Qué futuro para las remesas y el desarrollo en Centroamérica?  Algunos escenarios

    La sección anterior presentó una caracterización del comportamiento de los actores vinculados directa o indirectamente con el flujo de dinero proveniente de inmigrantes centroamericanos residentes en Estados Unidos.  Con esa caracterización se puede apreciar en forma general el futuro  que tendrán las remesas sobre la región Centroamericana. ¿Qué tipo de escenarios se pueden esperar en Centroamérica en relación con el futuro de las remesas?  En general, un pronóstico preliminar involucra considerar el estado de los dos lados que componen los extremos de las remesas, el emisor y receptor.  En el caso del emisor, con la información existente un escenario posible es el del aumento incremental y sostenido de las remesas.  Otro escenario a considerar es el de una caída de las remesas en el largo plazo.  Desde el lado del receptor de remesas, un escenario es el de la transformación gradual del uso de las remesas para el ahorro y la inversión social.  Por otro lado, dada la fragilidad económica en que se encuentran estos países, es posible observar una continuidad sobre el uso del dinero.  Finalmente otro escenario posible es aquel en que las asociaciones comunales se convierten en un agente nuevo del desarrollo local en estos países.  Estas asociaciones puede que crezcan en tamaño y en número y logren aumentar la asistencia a la región.

 

i. Continuidad sostenida: el efecto multiplicador de la migración por unificación familiar

    Un primer escenario es que para un futuro el flujo de remesas vaya a continuar exhibiendo la misma tendencia actual, es decir, un aumento incremental que dependerá de la continuidad del flujo migratorio, de la existencia de obligaciones familiares establecidas por nuevos inmigrantes, y por un cambio en la posición social de los inmigrantes.  Mientras sigan inmigrando cada año legalmente más de treinta mil Centroamericanos en los próximos años, la garantía de las remesas estará respaldada por los nuevos emigrantes quienes llegan al país huésped con obligaciones para con su país de origen.


    Esto no significa habrán grandes flujos de dinero que muestren mas que una duplicación de cantidades, como se observó en el aumento entre 1987 a 1997.  Mas bien, la cifra de los últimos años se mantendrá en el futuro y experimentará cambios menores.  En Nicaragua y Honduras es posible que aumenten más las remesas con la legalización de éstos.

 

ii-Caída: desempleo, deportaciones, retorno

   
Aunque se espere una continuidad en el envío de remesas, existe la posibilidad que las políticas migratorias se endurezcan aun más y se reflejen en el aumento de deportaciones en forma masiva.  Esto tendrá como impacto el que potencialmente un cuarto de la población inmigrante deje de enviar.  A este escenario se puede considerar la posibilidad del aumento del desempleo en Estados Unidos, lo que dará como resultado una caída del ingreso y por ende una disminución de las remesas.  Finalmente, existe el escenario del retorno de muchos inmigrantes que salieron de Centro América a principio de los años ochenta y que veinte años después piensan retirarse o jubilarse en sus países de origen.  Aunque estas tres posibilidades son factibles, ellas tendrían un impacto relativamente bajo.

 

iii-Cambio y Continuidad en el uso de las remesas

    Otro escenario probable es que se observe un cambio en la utilización de las remesas.  A medida que la población que recibe el ingreso del exterior mejore su situación, ésta pensará en invertir recursos en educación, salud o el mejoramiento (o adquisición) de su propiedad.  En varios países se ha observado un cambio gradual hacia esa dirección.  Sin embargo, el impacto estructural de la pobreza en la región ha demostrado que Centro América es muy vulnerable ante cambios drásticos en sus economías.  De ahí que de surgir una crisis económica, como la resultante del desastre centroamericano causado por el huracán Mitch en 1998 va a restringir al receptor de remesas en el uso liberal de tal dinero y se verá urgido a emplear el dinero para propósitos de subsistencia.

 

iv. Sostenibilidad y Diversificación: desarrollo local e inversión 

    Finalmente, un escenario reciente que vaya a continuar en el futuro es el del desarrollo sostenido de asociaciones comunales en Estados Unidos en pro del mejoramiento de los pueblos de origen del inmigrante.  La experiencia en otros países muestra que cuando un país se convierte en exportador de capital humano inmigrante, con el tiempo se crean vínculos que se extienden al campo del desarrollo local.  Ya se observa que estas asociaciones siguen formándose y mejorando su estado organizacional en algunos de los grupos inmigrantes.


    Un efecto de las actividades de estas comunidades será que también crearán incentivos en ciertos sectores inmigrantes a realizar pequeñas inversiones privadas en las zonas, en donde se creará empleo en tales áreas.  En cualquiera de los casos, habrá un impacto en el corto plazo.  Es posible, sin embargo, que de no producirse una revitalización e institucionalización del trabajo conjunto de organizaciones comunales, se produzca un agotamiento entre los contribuyentes de la comunidad.  Este fenómeno se ha observado en muchas organizaciones que surgen pero carecen de visión o plan futuro.


    Estos escenarios no son excluyentes entre sí.  Al contrario, lo mas probable es que puedan ocurrir en combinación.  De ahí que es importante pensar estrategias globales de acción.

 

4.  Propuestas
 

¿Existen algunas estrategias de acción que faciliten el desarrollo de algún escenario sobre otro?  Cuatro estrategias se pueden mencionar para tal respecto.  Capacitación, creación de donaciones de contrapartida, estimulación del desarrollo cooperativo con vínculos con los inmigrantes, y mejoramiento institucional y democrático de los gobiernos locales.

 

i.  Capacitación

    En el primer caso es importante ofrecer talleres de capacitación a las asociaciones comunales en la identificación de las necesidades del área en la que tienen que trabajar y la inversión de recursos apropiados para la mejora de esas necesidades. Muchas asociaciones deciden ofrecer asistencia de manera arbitraria y poco planeada.  Una capacitación sobre formación de agenda e identificación de necesidades mejoraría el envío de recursos.

 

ii.  Donaciones de contrapartida

   
Tanto los gobiernos Centroamericanos, como las empresas comerciales vinculadas con las remesas tienen una misión en cooperar con el desarrollo de la región.  La creación de fundaciones de desarrollo local con donaciones ofrecidas por compañías y recursos obtenidos por el gobierno, serán importantes incentivos para el desarrollo local y económico de los pueblos que exportan inmigrantes y las áreas aledañas o periféricas. 

 

iii.  Cooperativismo

    El desarrollo de cooperativas en Estados Unidos (credit unions) ha creado un vínculo con el envío de remesas a cualquier parte del mundo a través de cooperativas en el país receptor.  Estas cooperativas ayudan al inmigrante a formalizar su incorporación en los Estados Unidos mediante la apertura de cuentas bancarias y el derecho a varios servicios, como facilitación de préstamos o envío de remesas a bajo costo.  Mientras uno gasta $15 o mas en enviar hasta $200, a través de una cooperativa uno envía $6.5.  Por otro lado, en el país que recibe, las cooperativas podrán ofrecer recursos financieros para el desarrollo local, tales como acceso a la compra de equipo, maquinaria o materia prima para la producción de granos u otra industria.  Es importante por ello promover el cooperativismo bilateral y así estimular un desarrollo dual, del inmigrante como del de su familia y comunidad en el país de origen.

 

iv.  Gobierno local

    Finalmente, una propuesta de gran importancia se refiere al trabajo con gobiernos locales.  Las municipalidades en Centroamérica se sienten amenazadas ante la presencia de comunidades con asociaciones que en muchas ocasiones tienen más recursos que la municipalidad misma.  Es importante crear estrategias de comunicación, diálogo y cooperación entre las emergentes comunidades y los gobiernos locales para implementar planes conjuntos de desarrollo.


    Estos posibles escenarios y las diferentes recomendaciones de acción podrán ayudar a un mejor aprovechamiento de las remesas en el futuro de la región.

 

Referencias citadas aquí:

Menjívar, Cecilia; Julie DaVanzo; Lisa Greenwell; and R. Burciaga Valdez. 1998. "Remittances Behavior Among Salvadoran and Filipino Immigrants in Los Angeles." International Migration Review 32 (1) (Spring): 97-126.

NALEO Educational Fund and Tomás Rivera Policy Institute. 1998. America’s Newest Voices: Colombians, Dominicans, Guatemalans, and Salvadorans in the United States Examine Their Public Policy Needs. Los Angeles and Claremont, CA: NALEO Educational Fund and Tomás Rivera Policy Institute.

Orozco, Manuel. Remittances and Development Activities in Four Countries.  Prepared for the project “The Developmental Role of Remittances in U.S. Latino Communities and in Latin America and Caribbean Countries,” conducted by the Tomas Rivera Policy Institute (TRPI) and the InterAmerican Dialogue,  June 23, 1999.

Taylor, Edward J.  Do Government Programs “Crowd In” Remittances?  Prepared for the project “The Developmental Role of Remittances in U.S. Latino Communities and in Latin America and Caribbean Countries,” conducted by the Tomas Rivera Policy Institute (TRPI) and the InterAmerican Dialogue,  June 23, 1999.

Torres, Federico A. Uso Productivo de las Remesas en El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua. Mexico: CEPAL, September 1902.

U.S. Bureau of the Census. 1996 March Current Population Survey (CPS).



 

 


 

          Cantidades enviadas por países (porcentajes en columnas)

Envío

Colombia

R.  D.

Guatemala

El Salvador

  $1-100

7.4

13.3

10.7

7.5

  $101-500

24.5

23.7

15.4

13.9

  $501-1000

20.4

13.9

21.3

22.5

 $1001-2500

20.1

16.9

27.8

28.9

 $2500 >

27.5

32.1

24.9

27.3

Fuente: NALEO-TRPI

 

           Envío de Dinero y Tiempo de llevar enviando (porcentaje)

Envío

 1 to 5 años

 6 to 14

Mas de 15 años

  $1-100

7.3

7.6

12.8

  $101-500

15.1

13.3

30.5

  $501-1000

8.6

22.7

21.9

 $1001-2500

26.5

28.2

15.7

 $2500 >

42.5

28.3

19

Over all

17.6

53.5

28.8

Fuente: NALEO-TRPI

 

                                       Envío de Dinero e Ingreso

Envío

NR

 <$9,999

$10T-$14.99T

$15T-19.99T

Sobre 20T

$1-100

10.34%

39.66%

15.52%

5.17%

29.31%

$101-500

7.76%

24.14%

23.28%

19.83%

25.00%

$501-1000

8.87%

16.94%

25.00%

20.16%

29.03%

$1001-2500

13.33%

14.00%

34.67%

20.00%

18.00%

$2500 >

9.36%

8.77%

25.15%

17.54%

39.18%

Over all

10.18%

17.45%

26.17%

18.09%

28.11%

Fuente: NALEO-TRPI

 

   Salvadoreños y otros Centroamericanos recibiendo beneficio social

Grupo

AFDC

SSI

MedicAid

Food Stamps

Salvadorans

0.02%

0.01%

0.12%

0.11%

Other CA

0.03%

0.03%

0.13%

0.21%

Fuente: CPS 1996 Data.

 

        Estado de la Pobreza de Centroamericanos en Estados Unidos

 

Resto de C.A.

El Salvador

Población en 1996

995000

700000

Debajo de pobreza

26%

28%

CPS 1996 Data.

 

 

Envío de remesas de Latinos provenientes de cuatro países (El Salvador, R.Dom., Guatemala, Colombia)

Amounts sent

LPR

Nat. citz.

Not res./citz

U.S. born

  $1-100

8.2

14.7

8.5

17.4

  $101-500

19.7

24.5

13.5

20.8

  $501-1000

18.1

23.3

22

32

$1001-2500

22.8

18.3

29

28.8

$2500 >

31.2

19.2

27

1

Over all

55.4

14.1

29

1.6

Fuente: NALEO-TRPI